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lunes, 23 de marzo de 2015

Hablar de los demás siempre es hablar de uno mismo

Todo juicio que formulas lo acabas viviendo tú mismo en un futuro. Cuando condenas te condenas a ti mismo a vivir lo que has condenado.

Una mente despierta es aquella que sabe que es creadora y por ello debe estar constantemente en alerta. La mente despierta nunca habla de los demás porque hablar de los demás es hablar de uno mismo, Cuando uno ha despertado solamente habla de sí mismo.

me libero de los juicios
Juzgar es elegir conflicto en lugar de paz. No podemos evitar tener juicios pero éstos deben ser entregados y transmutados por esa parte de mí que sabe más. Entregados al Espíritu Santo o a esa divinidad que tengo dentro de mí.

Renuncio a culpar a nadie por lo que siento.

Proyectamos porque creemos que, de esta manera, nos liberamos de aquello que percibimos, y así parece que no tiene nada que ver con nosotros. No nos damos cuenta de que aquello que damos, o proyectamos, es lo que recibimos. Es una ley universal, recibimos aquello que damos.

Recogemos lo que sembramos, así que atentos a los juicios y a los pensamientos que sembramos.

La causa de lo que siento está en mi inconsciente. Si me siento mal es porque percibo mal. Renuncio a culpar a nadie por lo que siento. No hay causas fuera de mí. Nadie me ha hecho nada. El conflicto siempre está en mi mente.

En todo momento podemos elegir quiénes queremos ser con relación a todo lo que ocurre a nuestro alrededor. No olvides que el corazón es nuestro guía en las decisiones importantes y que cuando lo escuchamos, no hay razones para juzgar lo que acontece fuera y que podemos llegar a un estado de coherencia superior donde sabemos que cada persona que viene a nuestra vida lo hace para que aprendamos y podamos evolucionar.

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Almacuore Descodificación biológica

lunes, 16 de marzo de 2015

Las proyecciones

Dicen que los cuentos duermen a los niños y despiertan a los adultos.

Este cuento nos lleva a ser conscientes de que vemos la realidad y a las personas que tenemos a nuestro alrededor conforme a nuestras proyecciones.Nunca vemos al otro como es realmente, sino tal como lo percibimos después de haberle hecho pasar por el filtro de nuestras proyecciones.

Proyectamos lo que tenemos dentro, a menudo nos duele porque proyectamos nuestra sombra, esa parte de nosotros que negamos y que no queremos ver.

Ver la foto en el mensaje
Primero miramos en nuestro interior y decidimos qué clase de mundo queremos ver; luego proyectamos ese mundo afuera y hacemos que sea real para nosotros tal como lo vemos. Hacemos que sea real mediante las interpretaciones que hacemos.

El hombre acostado

Un hombre estaba extendido al borde del camino. No estaba ni herido ni muerto, sino únicamente cubierto de polvo.

Un ladrón le vio y se dijo:

- Seguro que es un ladrón que se ha dormido. La policía vendrá a buscarlo. Es mejor que desaparezca antes de que llegue.

Un poco más tarde un borracho le dio la vuelta tambaleándose:
-¡Mira lo que pasa por no aguantar la bebida!-contató- ¡vamos, que vaya bien amigo! ¡y la próxima vez no bebas tanto!

Llegó un sabio. Se acercó y se dijo:
- Este hombre está en extasis, meditaré a su lado.

Extraído de "La sabiduría de los cuentos" de Alejandro Jodorowsky

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